De manera generalizada nos encontramos en esa zona inconfortable de confort. Teniendo conciencia de la brecha entre el saber, hacer y ser, tendemos al caos para después generar orden, buscamos respuestas a interrogantes, tratamos de discernir unas necesidades con otras, queremos credibilidad, alumbrar soluciones, claras y limpias, proyectar un sistema auto sustentable, tener mayor impacto en nuestras empresas, instituciones, como personas, figuras públicas, lideres, Ceo ́s, para dejar huella en este mundo. El mayor activo del mundo en sí, es el capital humano, como arquitecta organizacional y emocional busco facilitar un proceso de orden, de armonía, de optimizar los recursos en forma y función, que sea autónomo, estratégico, sustentable, flexible y reproducible. Se trata de alinear de manera individual, nuestros principios, valores, objetivos, sueños, propósitos, significados robustos y deseos con la congruencia del ser y hacer, de manera personal, a una institución o empresa para que estén alineadas a su propia filosofía, misión y visión. El impacto, es happiness or happiness, mayor productividad, armonía, ventas, resultados, asertividad, claridad, empatía, rapport, habilidades desarrolladas y conversacionales.